Capitulo 10

Querido diario, hoy cuando me levanté desayuné normal, me vestí normalmente y salí a la calle normalmente, excepto por una cosa:
No paraba de darle vueltas a lo de Alejandro. Como podía ser una broma, si le veía, se suponía que estaba MUERTO y encima me
habla por internet? Me estaba volviendo loca.

- Lorena, llevate el movil por si acaso ¿vale? - Me dijo mi madre con tono de preocupación. -

- Vale, mamá - Le dije. - ¿Te pasa algo?

- No, es que estoy muy liada con esto de la casa, y tu padre está todo el dia en el trabajo y lo tengo que hacer yo sola.

- Lo haremos, pero ahora necesito despejar mis ideas. - Le dije consolandole. -

- Sal y diviertete, yo acabaré el resto del trabajo.

Cuando salí a la calle, ví una moto a fuera, no estaba segura de quien era. Aparecieron mis padres.

- Sorpresa! - Gritaron. -

- ¿Es para mi? - Dije ilusionada. -

- Toda tuya - Me dijo mi padre. -

- Graciaaaaaaaaaaaaaaas!! - Les abracé. -

Me fuí a dar una vuelta con mi nueva moto. Me encontré a las chicas, y lloraban desconsoladas al ver la foto de alguien. Me acerqué
y me pegué una sorpresa... Alejandro.

- Quien es ese niño? - Dije con preocupación. -

- Vivía en el pueblo, pero vivia con unos padres de adopción.

- Dice que se le aparece en la realidad a la gente pero yo creo que es solo un mito.

- ¿Hay gente que dice que le pasa?

- Claro que la hay, por todos lados. Por ejemplo, la señora de ahi enfrente dijo haberle visto una vez, y tras eso se quedó ciega.

Decidí seguir a la mujer antes de ir a casa a cenar, era ya por la noche y estaba cansada de tanto pensar. Necesitaba la playa para pensar,
la hechaba en falta. No pensaba como tenía que hacerlo.

Llegué a casa de la señora, y le pregunté que si era cierto eso de Alejandro.

- Sí, es cierto. Si lo haces publico a mas de una persona te pasarán cosas malas. Dice que solo busca una familia con la que estar
el resto de la eternidad.

- Pero si no lo cuentas, no te hará daño, ¿no? - Dije preocupada y nerviosa.

- No, pero hay que tener mucho cuidado con no enfadarlo, está en todas partes observandote. Puedes irte al otro lado del mundo y
puede seguir viendote. Solo se obsesiona como mucho con cinco personas a la vez, y si tu eres una de ellas tienes una de cinco posibilidades
de que se apodere de ti.

- Lo tendré en cuenta.

Regresé a casa, no encontraba mis llaves. Se me habian olvidado. Llamé al timbre de mi casa y tardaron mucho en abrir. Al rato, abrieron.
Era Alejandro...